El mes de mayo nos trae no solo el recuerdo, sino la presencia de María. Ella no solo está en nuestra capilla o en el cuadro que cuelga en nuestra clase: está también en nosotros, pendiente de todos y nos protege. Eso quiere decir, que la podemos invocar y pedirle el regalo mejor: que nos lleve hacia su hijo Jesús, y ser así su amigo.
En nuestras casas hemos estado viviendo experiencias de todo tipo desde que se suspendieron las clases. En este mes invitaremos a María también a nuestra casa para quedarse. Por eso os proponemos que le mostréis todas las habitaciones, acogiéndola con cariño. Iremos recorriendo todas las estancias encontrando objetos, espacios y personajes que nos puedan ayudar a fortalecer nuestro vínculo con ella.
Cada estancia nos permitirá ofrecer una flor a nuestra Madre del cielo. Cuidaros mucho. ¡Buen mes de mayo!
PDF CON LA CATEQUESIS CELEBRATIVA FAMILIAR «MARÍA TAMBIÉN SE QUEDA EN NUESTRA CASA»: mes_de_maria_2020-1
CAPITULOS DE TEXTO:
1 LUGAR DE ACOGIDA: RECIBIDOR / ENTRADA (FELPUDO)
2 LUGAR DONDE COMPARTIR (EN FAMILIA): SALÓN (SOFÁ)