El pasado sábado 3 de febrero, los directores y responsables de pastoral de los colegios católicos de las vicarías IV y V de Madrid fueron invitados a participar en el Encuentro convocado por ambas vicarías bajo el lema: «El desafío de la transmisión de la fe en el tiempo de hoy. Necesidad de las sinergias entre familia, institución escolar y parroquia». El Encuentro estuvo dirigido por D. Óscar García Aguado, vicario Episcopal de las vicarías IV y V.

El evento se inició con una oración en la capilla del colegio Tajamar, que en esta ocasión realizó la función de anfitrión, donde se invitó a los asistentes a profundizar en la transmisión de la fe en el contexto actual, desafío que requiere la estrecha colaboración entre la familia, la institución escolar y la parroquia.

Las ponencias fueron presentadas por D. José Luis Guzón, delegado Episcopal de Enseñanza, y D. Manuel Mª Bru, delegado Episcopal de Catequesis, bajo el título «ESCUELA, FAMILIA Y PARROQUIA EN COMUNIÓN PARA LA MISIÓN». De manera innovadora, ambos ponentes intercalaron sus intervenciones, ofreciendo una visión integrada y enriquecedora. Entre las reflexiones compartidas, destacan las siguientes:

    • Se hizo hincapié en el contexto de emergencia educativa que enfrentamos, marcado por crisis de autoridad, sentido, confianza y socialización.
    • Se resaltó el papel crucial de la parroquia como comunidad que ejerce una maternidad eclesial y promueve los procesos de iniciación cristiana.
    • Se subrayó la responsabilidad de la escuela católica en formar a sus alumnos no solo para el bien de la sociedad terrenal, sino también para servir a la difusión del Reino de Dios.
    • Se enfatizó la importancia de la colaboración entre la escuela y la parroquia, manteniendo cada una su identidad y misión, pero trabajando juntas en la evangelización y la formación integral de los alumnos.
    • Se transmitió que, para la parroquia, los procesos de iniciación cristiana de sus catecúmenos y catequizando de los niños, adolescentes y jóvenes que son alumnos de colegios católicos, sobre todo si lo son en el mismo contexto social y geográfico, son inseparables de la formación integral que en ellos reciben.

El trabajo en grupos proporcionó un espacio enriquecedor para el diálogo y el intercambio de ideas entre los participantes. El conocimiento mutuo de los diferentes colegios y las contribuciones de cada uno fueron altamente valoradas. La sesión de tertulia posterior permitió profundizar aún más en los temas discutidos durante la mañana, con preguntas interesantes y un intercambio libre de ideas y pensamientos entre los asistentes. Finalmente, la jornada concluyó con una excelente comida y un ambiente de diálogo.