Archimadrid.- El domingo, 17 de noviembre, se celebra la VIII Jornada Mundial de los Pobres con el lema “La oración del pobre sube hasta Dios” (cf.Si 21,5). En este día, el Papa Francisco invita a todos a una atención espiritual más seria hacia los pobres, que tienen necesidad de Dios y de alguien que sea signo concreto de su escucha y cercanía.
Con este motivo, Vicente Martín, obispo auxiliar de Madrid, ha enviado una carta a la diócesis en la que recuerda que esta jornada «es una oportunidad pastoral a estar atentos y escuchar la oración de los pobres, a tomar conciencia de su presencia entre nosotros y de su necesidad».
Por eso, invita a que en las parroquias o en los arciprestazgos se creen espacios, ya desde la semana anterior a la celebración de esta convocatoria, para la escucha de la Palabra, la oración común y la escucha, también, de las personas «que están en situación precaria». «Solo podremos darles el protagonismo que merecen en nuestras comunidades cristianas si se lo hemos dado antes al Señor», asevera.
Actos diocesanos
El sábado 16 de noviembre, el cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid, presidirá una Misa, a las 19:00 horas, en la catedral de la Almudena, que estará seguida de una chocolatada. El arzobispo de Madrid ha mostrado su especial interés en que acudan las personas que son acompañadas en centros de acogida, residencias o parroquias. «De lo que se trata —observa Martín en su carta— es que suba nuestra oración a Dios, ya que, ante Él, todos somos pobres y necesitados».
El domingo 17 de noviembre tendrá lugar la celebración en las parroquias madrileñas. A las 12:00 horas, el cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid, presidirá la Eucaristía en la Iglesia de San Antón (c/ Hortaleza, 63). Tras ella, un almuerzo solidario para las personas en situación de vulnerabilidad que habitualmente asisten a la iglesia.
Actos previos
La archidiócesis de Madrid ha organizado varios actos que comienzan el lunes, 11 de noviembre, con la oración guiada “La oración del pobre sube hasta Dios”, por el delegado de Laicos, José Manuel Aparicio. El Centro de Estudios Sociales de Cáritas Madrid (Santa Hortensia, 3) acogerá este acto, a las 17:00 horas.
Del 12 al 15 de noviembre se celebrará una Jornada de Puertas Abiertas para conocer de cerca los proyectos de exclusión de Cáritas diocesana de Madrid.
III Concurso de fotografía social: «Miradas que dan vida”
Dentro de la VIII Jornada Mundial de los Pobres, quieren mostrar una mirada que de vida y hacer visible la realidad que nos rodea». Por ello animan a las personas voluntarias, contratadas y atendidas por Cáritas Madrid a que participen en el concurso de fotografía social. Los trabajos se pueden enviar hasta el 7 de noviembre, al correo electrónico comunicacion@caritasmadrid.org, especificando en el asunto “Concurso de fotografía”
El 8 de noviembre el equipo de comunicación elegirá las 15 mejores fotos, que formarán parte de una exposición que podrá visitarse del 11 al 18 de noviembre.
El mensaje del Papa Francisco
El Papa Francisco ha elegido para la VIII Jornada Mundial de los Pobres un lema particularmente significativo para este año dedicado a la oración, en proximidad del comienzo del Jubileo Ordinario de 2025: «La oración del pobre sube hasta Dios» (cf. Si 21,5). Esta expresión del antiguo autor sagrado Ben Sirá resulta inmediata y fácilmente comprensible.
El Santo Padre reitera que los pobres tienen un lugar privilegiado en el corazón de Dios, que está atento y cercano a cada uno de ellos. Dios escucha la oración de los pobres y, ante su sufrimiento, está “impaciente” hasta no haberles hecho justicia. En efecto, es de nuevo el libro del Sirácida que lo atestigua: «la sentencia divina no se hace esperar en favor del pobre» (cf. Si 21,5). También invita a todos a aprender a rezar por los pobres y a rezar junto a ellos, con humildad y confianza. La Jornada Mundial de los Pobres es una oportunidad para tomar conciencia de la presencia de los pobres en nuestras ciudades y comunidades, y para comprender sus necesidades. Como siempre, el Papa menciona también a los «nuevos pobres», que surgen de la violencia provocada por las guerras, por la «mala política hecha con las armas» (n. 4), que provoca muchas víctimas inocentes.
Además, reitera que la oración debe encontrar la verificación de su autenticidad en la caridad concreta. En efecto, la oración remite a las obras y las obras remiten a la oración: «si la oración no se traduce en un actuar concreto es vana (…) Sin embargo, la caridad sin oración corre el riesgo de convertirse en filantropía que pronto se agota» (n. 7). Este es el legado que nos han dejado tantos santos a lo largo de la historia, como Santa Teresa de Calcuta, quien repetía siempre que precisamente la oración era el lugar del que tomaba la fe y la fuerza para servir a los pobres. En el Mensaje encontramos también el ejemplo de San Benito José Labre, “vagabundo de Dios”, pobre entre los pobres, cuya urna se encuentra en Roma, en la iglesia de Santa Maria ai Monti, que es meta de muchos peregrinos.
No olvidemos, sin embargo, a las numerosas personas que en nuestras ciudades siguen dedicando gran parte de su tiempo a escuchar y apoyar a los más pobres. Son rostros concretos que, con su ejemplo, «dan voz a la respuesta de Dios a la oración de quienes se dirigen a Él» (n.7). La Jornada Mundial de los Pobres es también una ocasión para recordar a cada uno de ellos y dar gracias al Señor.