TUTORIAL DEL CUADERNO 2 PARA LA FORMACIÓN DE LOS CATEQUISTAS

DE LOS NUEVOS RECURSOS CATEQUÉTICOS DE LA TERCERA ETAPA (CATEQUESIS PARA ADOLESCENTES Y JÓVENES) PUBLICADOS POR PPC:

“JESUS: ¿DÓNDE VIVES? VENID Y VERÉIS”

DEL PROYECTO DE RENOVACIÓN CATEQÚETICA DE LA DELEGACIÓN DE CATEQUESIS DEL ARZOBISPADO DE MADRID

 

  • Video tutorial:

  • Video completo presentación del Cuaderno en el Curso de formación para catequistas:

 

  • Esquema de la presentación en el curso para catequistas y adolescentes:

Este cuaderno 2 de nuestro curso catequético, aborda una de las grandes preguntas existenciales: ¿Tiene sentido la vida?

Es un cuaderno vital, con lo que no lo usaremos tras el primero, pudiéndolo utilizar en el comienzo de nuestro segundo año de catequesis, por ejemplo. Un recorrido catequético antes de la Navidad, puede haber sido el conformado por un cuaderno vital-este mismo cuaderno 2 valdría-, más uno vocacional, más uno litúrgico.

Cuaderno 2:

– Portada:

El título, centro catequético de esta unidad: “Si conocieras el don de Dios”, está recogido del texto de la samaritana.

La fotografía es un grupo de chavales sonrientes, contentos, donde se subraya su alegría, al igual que el encuentro con Jesús de la samaritana es de alegría.

Dios que es donación, donación recíproca, es el descubrimiento que tiene hacer la voluntad de Dios en la vida.

– Página 2:

Es el sumario del cuaderno.

– “Pregúntatelo todo”:

La película que se nos presenta es: “La vida es bella”, del año 1997 y del escritor, director y protagonista Roberto Begnini. Recoge ambientes del inicio y final del largometraje, jugando con partes de cinco escenas.

La clave en esta tragicomedia, se encuentra en la frase del niño que está dentro del engaño del juego del campo de concentración: “¡Hemos vencido!”. ¡Hemos vencido!, la guerra, dirían los mayores; ¡Hemos vencido!, el  juego (por el tanque), diría el niño. Lo verdaderamente importante es “Dar sentido a la vida”; no está tanto en lo que la vida nos ofrece sino en el valor que nos encontramos.

Si hiciésemos una comparación con el gran autor que es Calderón de la Barca, diríamos que lo importante no es el personaje a desarrollar sino la historia que nos envuelve y trasciende que es la vida. Importancia del “Cómo” y no el “Qué”; siguiendo la voluntad de Dios hacemos bien nuestro personaje, pues la voluntad de Dios es algo positivo. El padre de la película le hace vivir  a su hijo una experiencia de un modo sobrenatural, reconociendo un sentido.

Los cuatro recuadros encontrados, atenderán a la primera parte catequética y estarán ligados entre sí. Serán: el que atiende a la pregunta: “¿Qué sentido tiene la vida?”, el del cuento: “Un lugar para la princesa”, el texto del Libro del Eclesiastés, y un muy buen poema de Mario Benedetti.

El encontrarnos en el primer cuadrito con esta nueva pregunta (¿Qué sentido tiene la vida?) es porque es la que nos revierte tras hacernos la primera de “¿Tiene sentido la vida?”. No hay que dar nada por hecho, hay que ir al inicio de las cuestiones vitales.

– “Cuento”:

En “Un hogar para la princesa”, todos los pretendientes ofrecían una casa mejor pero no un hogar. El que menos puede ofrecer desde el punto de vista cuantitativo, contacta con su anhelo, y es el elegido para vivir con ella.

Aborda la realidad desde una perspectiva complementaria; las cosas o la realidad profunda de la vida.

– “Escuchamos”:

Nos encontramos con una primera aproximación a uno de los libros sapienciales (Libro del Eclesiastés) sobre la sabiduría.

Parte procatequética en la que pretendemos dos cosas principales en los chavales: una, un análisis de objetivo del texto (lo que dice el texto) y otro subjetivo (lo que me dice a mí el texto); que se puedan preguntáselo todo, pero en profundidad, ahondando, no conformándose en una explicación superficial de la vida, respondiendo preguntas para interpretar la vida y no solamente quedándose en el saber.

Podemos recoger algún texto del Antiguo Testamento que sea testimonio para nuestros chicos de la alianza entre jóvenes-abuelos, ya que la acción del diablo actúa en la ignorancia.

– “Soñamos”:

Mario Benedetti fue un poeta uruguayo que gusta mucho y preferido de nuestro Papa Francisco, y es uno de los más queridos y leídos por gran parte de los lectores de poesía de todo el mundo.

“No te quedes inmóvil”, es una llamada directa al joven para que no se satisfaga solo con la primera respuesta. Es una llamada a la inquietud profunda; sensación de la insatisfacción, búsqueda de algo más.

– “Mi diario”:

Es el momento de poner en negro sobre blanco las diferentes propuestas que hayan encontrado.

Han recibido una provocación, una información, una información provocativa, y ahora pueden devolverla escribiéndolo.

“Ven y escucha”:

Se nos abre la segunda parte catequética, con una sed espiritual de agua, no material. La samaritana va al pozo a por agua; nunca se les ha dicho a los chavales que necesitan buscar saciar una sed de vida, una se de Dios.

Intentaremos realizarlo en el contexto del oratorio o capilla.

– “Miramos”:

El testimonio actual de Asia Bibi es el de esa mujer que representa a miles de personas con fe en el mundo que reciben persecución religiosa. De cada tres perseguidos en el mundo, dos son cristianas.

Asia Bibi es un paradigma, la intentan inútilmente hacer renegar de su fe cristiana en favor de la musulmana; es un simbolismo, como la samaritana, pozo de agua reconociendo a Jesús.

Acercarse poco a poco a la confesión de la fe. Hay que se valiente, pues nos implica.

– “Admiramos”:

Victor Frankl, va a ser el único personaje que o es cristiano, diálogo interreligioso (tercer diálogo).

Es un judío, pero cree igual que nosotros en un solo Dios; es un reconverso, al haber perdido la fe.

“El hombre en busca de sentido” está traído a colación en este momento, tanto por su interesantísimo mensaje como por la similitud que tiene con la película que hemos podido visionar al principio de nuestro cuaderno 2 (“La vida es bella”), por estar centrado el testimonio-trama en el campo de concentración nazi de Auschwitz. La diferencia primordial radicará en que Victor Frankl será un prisionero real y no ficticio como el del film.

Eminente psiquiatra, de la tercera escuela vienesa, tiene un planteamiento diferente en la “Escuela de la Logoterapia”, del sentido, que nacerá en Auschwitz por la propia experiencia. Aunque haya una misma terapia cognitiva entre Sigmund Freud y Victor Frankl, la orientación será distinta: Froid tumbará al paciente en el diván y le hará preguntas relativas a sus temores, pesadillas…; Victor Frankl tumbará al paciente en el diván y le hará preguntas relativas a sus ilusiones, esperanzas, motivaciones…

Concepto de la libertad interior: poder decirme continuamente que esto no es verdad, no es justo, no perder la conciencia de la libertad humana y la dignidad humana; en mi conciencia no puede entrar ningún carcelero. Creo una fortaleza, una razón para vivir, un sentido a la vida.

Ultrasentido: es el sentido último, fortaleza de todos los demás, el sentido global y ser del sentido, siendo Dios y la voluntad de Dios.

– “Escuchamos”:

En la capilla, en el sagrario, en el oratorio…, haciendo ruptura de nivel.

Daremos unas claves para profundizar la Palabra, con las cuatro palabras más el momento personal de la oración.

– “Respondemos”:

En silencio, responder a las preguntas por escrito delante de Dios y dirigiéndonos a Él.

– “Meditamos”:

En “Un encuentro personal”, hay un pequeño texto importante. Pequeña meditación que recoge bien la clave del texto de la samaritana.

Es conveniente leerlo y dejar que a cada uno le vaya dejando huella.

Las tres preguntas de la página 68 de nuestra Guía (¿cuales son “los pozos”de tu vida en los que puedes encontrar a Jesús?, ¿cómo te ves en el papel de la samaritana?, ¿deseas tu también esa única agua plenamente saciable?), nos pueden ayudar como catequistas.

“Cuanto te amo”, pertenece a nuestro santo San Rafael Arnaiz Barón. Uno de los grandísimos místicos del siglo XX, persona que hace experiencia gozosa en el encuentro personal con Jesús, mostrándose en la pintura, poesía, meditaciones, oraciones preciosas como la que se nos presenta.

“Solo Dios”, era el lema del Hermano Rafael- monje trapense del Monasterio Cisterciense de San Isidro de Dueñas (Palencia)-, modelo de los jóvenes de todo el mundo.

– “Abre los ojos”:

Los pequeños recuadros de colores son unas pistas de lo que iremos viendo en esta tercera parte del cuaderno.

Parte formativa, consecuencia de lo que hemos intentado crear: un encuentro con Jesús.

– “Aprendemos”:

Idea de relacionar la samaritana, el sentido de la vida…, con la experiencia del pueblo de Israel en el Éxodo (es el pueblo de la Alianza, el que vive los mandamientos, y no solo el de abandono de Egipto).

Es un buen momento para recordar los diez mandamientos, basado en el que hemos descubierto el camino de la vida; si quieres ser feliz, usa bien todo los que se te ha dado (los diez mandamientos).

– “Imitamos”:

Nos encontramos con los santos, y esta vez aparece ante nosotros la figura de San Vicente de Paul.

  1. Vicente de Paul expresa la realidad profunda de encontrar y responder a Dios buscando Su voluntad.

Hemos de ser capaces de descubrir los dos amores a Dios de S. Vicente: uno, el del niño respecto al padre, le ama y responde con cariño; otro, el del joven respecto al padre, en su estado de madurez le agrada cumpliendo con su misión.

¡Intentemos hacer siempre un pequeño guiño para saber algo más de los santos!

– “Cuidamos”:

Cuidamos “a mí mismo”, en la voluntad de Dios. Idea de ser testigos del Señor.

Sacado de lo que podría ser la vida del cristiano en un día, se ofrecen pistas sacadas de la Sagrada Escritura.

Con el deporte como fondo, hay 10 jugadas ¿que seremos capaces de realizar para tener nuestra conciencia tranquila en Dios? Cada día es un partido distinto.

– “Compartimos”:

Recordemos que “La Declaración Universal de Derechos Humanos” surge tras la Segunda Guerra Mundial, y que son la expresión moderna inspirada en el Evangelio de la Escuela de Salamanca    (S. XVI) en el planteamiento de la filosofía del derecho de las gentes, elaborada por teólogos y profundamente cristiana.

Hay una visión de la doctrina social de la Iglesia en la explicación de estos derechos humanos, pues quienes los otorgan somos nosotros mismos, como leyes fundamentales en la dignidad humana que nos da Dios.

Inculcar una sensibilidad moral es principal.

– “Participamos”:

Es importante ser ciudadano pero más importante aún es ser persona; somos ciudadanos porque somos personas y no al revés.

Debemos tener presente la palabra “Subsidiaridad”, concepto de lo que puedo hacer yo como persona y como ciudadano y no lo tiene que hacer una estructura de poder; realidad de libertad de asociación, iniciativa privada…El sentido está al servicio de la sociedad y no al revés.

La dignidad y el respeto es fundamental.

La sociedad civil nos la podemos encontrar en la Iglesia, la catequesis, el voluntariado de Cáritas…

– “Comunicamos”:

Es la experiencia comunicativa, esta vez es el octavo mandamiento (no dirás falso testimonio ni mentirás) el que hile con nuestro tema.

Decir la verdad nos enriquece, se goza con ella, no es una imposición. La verdad te hace libre, no la libertad, porque con la verdad sabrás elegir y tendrás criterio.

Podemos recordar a los chavales el eslogan de “Con la verdad por delante” y su significado.

Si hay un mandamiento a cumplir y en el que caen de continuo los chicos, ese es el de la mentira. Debemos inculcarles que la mentira no es un pecado inocente, baladí, a poco tener en cuenta, pues como diría la Beata Teresa de Calcuta: “La persona más peligrosa es la mentirosa”. Es mejor callar a mentir.

– “Oramos”:

San Anselmo es un santo pensador de la Edad Media. La oración que tenemos delante suya será de petición, directa, para ayudar a conocer a Dios y la voluntad de Él.

– “Mi diario”:

Es el momento para que escriban los chicos en clave de oración.

Posibles comienzos, podrían ser: “Jesús: He descubierto…”, “Eterno Padre: Te comento…”, “Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo: Te doy gracias…”.

– Contraportada:

El Salmo 39: “Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad”, es precioso para concluir nuestro cuaderno 2: “Si conocieras el don de Dios”.