Título: El desafío de la fe. Encuentros con Jesús en el evangelio de Juan

Autor: Cesar Franco

Editorial: Encuentro

Para los que buscan

En la introducción de este libro apasionante, monseñor César Franco relata una verdad que desde la experiencia humana todos estamos llamados a reconocer si somos sinceros: “Nadie, en el uso de la recta razón, rechaza la luz y opta por la oscuridad; nadie prefiere la muerte a la vida; nadie elige la ceguera privándose libremente de la visión; nadie ante la enfermedad, evita al médico que le ofrece la salud. Ni el torpe paralítico de la piscina probática, que llevaba treinta y ocho años enfermo (cf. 59), ni el sagaz ciego de nacimiento (cf. 9) ni las hermanas de Lázaro cerraron la puerta a la vida y a la resurrección que Jesús ofrecía. Y nadie, ante la ceguera del pecado que oscurece la existencia, rechaza la luz que rompe las tinieblas; nadie, excepto los que prefieren la oscuridad y creen que ven, aunque permanecen ciegos (cf. 9,41)”. Y este es el punto de conexión que el autor del Cuarto Evangelio tiene con todos sus lectores, de ayer, de hoy, y de siempre. Pues, como nos explica César Franco, San Juan escribe el evangelio para salir al encuentro de todos los hombres, ciegos, pobres, mendigos, pecadores, para hacerles esta pregunta: ¿qué buscáis? De hecho, con esta pregunta que Jesús hace a los primeros discípulos abre el evangelio, y con esa misma pregunta que hace a María Magdalena, lo cierra.

Y “como una atmósfera que invade al lector y le cautiva progresivamente”, el evangelista nos viene a decir continuamente que “quien busca encontrarse con Cristo, en la verdad de su persona, sólo tiene que dejarse llevar por la fuerza persuasiva de sus palabras y hechos que tejen con magistral armonía las diversas escenas de la vida de Jesús”. Y lo hace enseñándonos a contemplar a Jesús, porque en él esta la vida y la vida es la luz de los hombres (Jn., 1,3-4), y presentándose él mismo como habiendo realizado ese camino”.

Es más, “en el prólogo de su obra nos ofrece la clave, no solo para aprender a contemplar, sino para interpretar su evangelio: El verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, y hemos contemplado su gloria, gloria propia del unigénito del Padre” (Jn. 1, 14). Esta es la razón por la que “podemos decir que, en su narración de los hechos y dichos de Jesús, común a los cuatro evangelios, Juan destaca en la descripción de la vida eterna que habita en él, de forma que el cuarto evangelio parece ser una apología de la vida que Dios nos ha revelado en su Hijo, para que este le regale a los hombres: He venido para que tengan vida, y la tengan abundantemente (Jn. 10,10)”.

Por eso en el Cuarto Evangelio son fundamentales “las escenas con los diversos personajes que entran en relación con él. Juan es un experto narrador de encuentros y diálogos con Jesús donde este revela progresivamente su identidad al tiempo que ilumina los entresijos del alma de sus interlocutores, quienes, impactados por la personalidad de Jesús, se hallan ante el desafío de acogerlo o rechazarlo”.

El autor de este libro selecciona del evangelio de Juan los encuentros de Jesús con los primeros discípulos, con Nicodemo, con la mujer samaritana, con el ciego de nacimiento, con Marta (la hermana de María y de Lázaro), con Pedro, con Poncio Pilato, con María Magdalena, con Tomás, y con Juan mismo, el testigo de la historia. Todos discípulos menos Poncio Pilato, elegido por “la brillantez que el evangelista despliega para presentar a quien, pudiendo haber creído en él, le da la espalda”.

Quienes conozcan bien a monseñor César Franco, quien fue obispo auxiliar de Madrid y hoy es obispo de Segovia, saben no sólo de su gran maestría como experto exegeta especializado en los evangelios, sino también de su gran magisterio pastoral, sobre todo de su elocuencia como predicador, siempre unida a su gran caridad pastoral. Siempre transmisor de la frescura de la pasión por Jesucristo, esa que le llevo a enamorase de los santos evangelios, hasta querer saber todo de ellos, y hasta averiguar de ellos aspectos antes desconocidos.

Manuel María Bru Alonso. Delegado Episcopal de Catequesis del Arzobispado de Madrid. 

César A. Franco Martínez, obispo de Segovia, es doctor en teología por la Universidad Comillas (Madrid) y diplomado en ciencias bíblicas por L École Biblique et Archéologique de Jerusalén. En Ediciones Encuentro, además de su tesis doctoral sobre la Carta a los Hebreos, tiene publicados varios libros de investigación bíblica en la colección Studia Semitica Novi Testamenti. A nivel divulgativo, ha publicado también en esta editorial Cristo, nuestro amigo, que ha sido traducido al italiano. Su último ensayo, publicado en 2019 en la BAC, se titula Pasión y Compasión de Jesús.
En la Conferencia Episcopal Española ha sido presidente de la Comisión de Enseñanza y Catequesis. Durante su tiempo de obispo auxiliar de Madrid (1996-2014) fue consiliario nacional de la Asociación Católica de Propagandistas y coordinador general de la Jornada mundial de la juventud de 2011.